Mini Semana Boreal

Retirada del coche de alquiler en el aeropuerto y salida en dirección sur atravesando la península de Reykjanes, territorio reconocido por sus manifestaciones volcánicas, montañas, acantilados poblados de aves, faros y pequeños pueblos de pescadores. Podemos detenernos en Krýsuvík, campo geotermal salpicado de manantiales, columnas de vapor y pozas burbujeantes. Abandonamos temporalmente la costa, dejamos atrás las localidades de Selfoss y Hella y penetramos en las suaves llanuras del sur. Una nueva parada nos mostrará Seljalandsfoss, elegante cascada cola de caballo que puede observarse desde su parte trasera. Unos kilómetros más adelante será el turno de contemplar Skógafoss, una poderosa cortina de agua que mana de un promontorio rocoso.

Alcanzamos de nuevo la costa y visitamos una de las playas más conocidas del país, Reynisfjara, con sus cuevas, columnas y arenas negras. Alojamiento en Vik. Si las condiciones meteorológicas acompañan, el área es apropiada para contemplar auroras en la noche.

Partimos hacia el norte para descubrir los hitos del famoso “Círculo de Oro”:  la poderosa doble cascada de Gullfoss; la zona geotérmica de Geysir, con pequeños manantiales de agua hirviente y la columna de agua y vapor expulsada por el geiser Strokkur; y el Parque Nacional de Thingvellir, sede original del Parlamento Islandés desde el siglo X y donde puede observarse los efectos de los movimientos de las placas tectónicas de Noramérica y Eurasia. Hoy descansamos en Reykjavik, la acogedora capital islandesa.

Nos sugieren dedicar la jornada a visitar la interesante Península de Snæfellsnes, presidida por el Snaefellsjökull, el grandioso glaciar. Entre sus múltiples atractivos destacan la pequeña cascada de Selvallafoss, la montaña y cascada de Kirkjufell, junto al pueblo marinero de Grundarfjördur, los acantilados entre Hellnar y Arnarstapi y la iglesia negra de Budir. Alojamiento en Borgarnes. Con suerte y si las condiciones meteorológicas son favorables, podremos contemplar el espectáculo fantástico de colores y luces de las auroras boreales.

Antes de abandonar el área conducimos hasta el pequeño pueblo de Reykholt, consagrado al escritor medieval islandés Snorri Sturluson. En sus proximidades conocemos las cascadas de Hraunfossar, donde el agua fluye por debajo de un campo de lava, y Barnafoss o “cascada de los niños”. Después nos dirigimos a Reykjavik, donde podemos visitar sus principales atractivos: la catedral de Hallgrimskirkja, el lago, el Ayuntamiento, el Parlamento o el centro de eventos Harpa.

Conducimos al aeropuerto, devolvemos el coche de alquiler y embarcamos en el vuelo de regreso a España.